Legion

Terminó la primera temporada y acá te cuento las razones de por qué es una de las series que no podes dejar de ver.

 Estamos en un tiempo en el cual los superhéroes están a la orden del día y no sólo están en los cines, sino que también han hecho su aparición en la pantalla chica ofreciendo una gran variedad de shows para todos los gustos. Dentro de esta idea hizo su aparición el universo de los X-Men de la mano de Legion, basado en el cómic de Marvel creado en 1985.

La historia gira entorno a David Haller que pasa sus días en un hospital psiquíatrico debido a los trastornos mentales que padece. Todo cambia a partir de la llegada de otra paciente al lugar llamada Sydney, en donde el protagonista empezará a tener dudas sobre la enfermedad que padece. Luego de una serie de hechos, David logra escapar del hospital y descubrirá que Syd forma parte de un grupo de mutantes que creen que él también tiene capacidades especiales.

La serie está a cargo de Noah Hawley (responsable de Fargo) y protagonizada por Dan Stevens (actual Bestia de Emma Watson); Rachel Keller y Aubrey Plaza. Cuando nos enteramos que Marvel iba a hacer un show basado en los mutantes pensamos que sería una historia más de superhéroes, pero sin embargo lograron traernos algo completamente nuevo.

A diferencia de lo que estamos acostumbrados con otras series del género y del universo X-Men, Legion tiene una mirada distinta que va más allá de ser héroes. Toda la historia está narrada desde el punto de vista del protagonista, por lo que todo el tiempo está jugando y poniendo en dudas lo que es real y lo que no lo es.

 La mente pasa a ser en esta historia un escenario más, mientras que  el antagonista es diferente a lo que estamos acostumbrados, ya que en este caso no es alguien externo, sino interno. Estas cuestiones llevan a que el show sea atractivo y entretenido, además de tener una gran producción con escenas muy bien hechas, que en algunos casos llegan a ser surealistas y psicodélicas.

Dan Stevens hace un gran trabajo en la piel de David sabiendo mostrar qué es lo que ocurre en la cabeza del protagonista, cuya mente le juega trucos.  Todos los capítulos giran alrededor del autodescubrimiento de los personajes.

La serie explora otros rincones del mundo de los X-Men combinando lo flashero con una cuota de humor y romance. Si bien la historia está en el mismo universo (sobre todo porque el protagonista es hijo del profesor Charles Xavier), los personajes no tendrán conexiones con las películas que ya conocemos de los mutantes.

Todos estos factores no hacen a Legion una serie más del montón, sino que demuestra que se puede hacer algo creativo, innovador y de calidad, más allá de lo que ya conocemos. El show tiene ocho capítulos con una segunda temporada confirmada para conocer más de la vida de David.